Tatin de alcachofas y jamón
Preparé esta tarta convencida de que sobraría la mitad para llevarle a mi madre al día siguiente, pues me equivoqué por completo. ¡Éramos dos comiendo y no sobró ni medio pedazo! Así que tuve que volver a prepararla de nuevo, aunque ya fui más previsora e hice el doble de cantidad pues éramos cuatro para comer.
Esta tarta tatin de alcachofas y jamón ibérico es espectacular, hecha con base de hojaldre que podéis comprar ya preparada, incluso las alcachofas las podéis comprar enlatadas (eso sí, esto último yo os recomiendo que las hagáis vosotros mismos, para mí no hay color). El toque del jamón ibérico y la cebolla caramelizada hará que esta tarta se os deshaga en la boca.
Ingredientes
- 10-12 alcachofas
- 1 lámina de hojaldre (puede ser congelada)
- 5 lonchas de jamón ibérico
- 1 limón
- 1 cebolla
- 50g de queso Parmesano
- Tomillo
- Aceite de oliva virgen extra
Preparación
- Empezaremos pelando las alcachofas y desechamos las capas exteriores dejando únicamente el corazón. A medida que las vamos pelando las iremos poniendo en un cuenco grande con agua y limón para que no se oxiden (ojo porque se oxidan muy rápido).
- Cortamos la cebolla en juliana (a tiras finas) y la doramos en aceite de oliva virgen extra a fuego bajo para que no se tueste demasiado. Una vez esté dorada la retiramos sobre papel absorbente para retirar el exceso de aceite y reservamos.
- Mientras se hace la cebolla podemos ir hirviendo las alcachofas durante unos 10 minutos.
- Ponemos la cebolla sobre nuestra sartén antiadherente de mango desmontable BRA Infinity.
- Una vez estén hechas las alcachofas, las dispondremos una al lado de la otra encima de la cebolla ocupando toda la sartén, con la parte fea (base de la alcachofa) hacia arriba (luego le daremos la vuelta).
- Tiramos el queso parmesano rallado por encima, un poco de tomillo, sal y pimienta, añadimos las láminas de jabugo y por último terminamos con una lámina de hojaldre.
- Pinchamos el hojaldre con la ayuda de un tenedor para que no se infle en el horno y horneamos, retirando el mango de la sartén, durante unos 20 minutos a 180ºC, hasta que se dore.
- Le damos la vuelta como si fuera una tortilla sobre un plato plano y ¡servimos!